Multitudinaria marcha por la Unidad de España

Inmensa mayoría de jóvenes

El patriotismo se levanta

La mayor movilización hasta ahora del patriotismo español en el siglo XXI

La provocación separatista, anunciada de antemano para la final de la Copa de España de fútbol, que se iba a celebrar en el Estadio Vicente Calderón de Madrid, entre el F.C. Barcelona y el Athletic Club de Bilbao, silbando y abucheando el Himno Nacional Español, ha tenido una contundente respuesta de parte del patriotismo español, con miles de jóvenes en las calles, en un ambiente enardecido de patriotismo y amor a España, rechazando contundentemente el separatismo y las debilidades de los partidos políticos de ámbito nacional que se deberían enfrentar a ellos y les van permitiendo impunemente que se crezcan en su arrogancia y en su desafío a España. La previsión se cumpliría pocas horas después en el estadio y la mayoría de los aficionados de esos clubs consumaron su traición y su desprecio a nuestra Patria, sin que los representantes del Estado tuvieran la respuesta adecuada a tamaña ofensa.

Sólo el pueblo español, convocado por las organizaciones patrióticas, tachado de ultra, demonizado, marginado y manipulado, salió a la calle para despertar a sus compatriotas dormidos, engañados y confundidos, para hacer saber a los traidores que sus torvos propósitos no quedarán sin respuesta.

En la foto, mientras José Luis Jerez Riesco lee el manifiesto final, puede verse a Alberto Ayala, Gonzalo Chicharro Lamamié de Clairac, José Luis Corral, Eduardo Arias, Manuel Andrino y José María Caballero. En el otro extremo, Carlos Batres.

La unión de los movimientos patrióticos fue determinante para el éxito de la Marcha por la Unidad de España. La Falange, Nudo Patriota Español, Movimiento Católico Español-Acción Juvenil Española y Vieja Escuela de Madrid fueron los convocantes. Se adhirieron expresamente el Sindicato TNS,  Juventudes de La Falange, Patriotas.es, Radio Patriotas.es, MYL, AC. In Memoriam Juan Ignacio, Vieja Guardia, Alternativa Española y la Hermandad Nacional de Banderas de Falange y la de Aragón y Resistencia Cristiana.

En la presidencia estuvo también Carlos Rodríguez y entre el público pudo verse a Rafael López-Diéguez y a José Fernando Cantalapiedra, Manuel Galiana, José Luis Díez y muchos otros.

Esta convocatoria unitaria debe repetirse en el futuro, pues está demostrado que hay un pueblo que responde a los ideales patrióticos y que la movilización es posible si hay unidad.

La presencia de numerosos medios de comunicación, algunos visibles también en la foto, da cuenta también del eco y la fuerza de la unidad.

Precisamente la "unidad" fue una de las palabras más conjugadas y repetidas en la tarde. "Unidad nacional", "España unida jamás será vencida", "España, una y no cincuentaiuna". "Gibraltar español" fue otro lema de rabiosa actualidad, junto a "No nos engañan, Cataluña es España", "No nos engañan, Vascongadas es España". "Josué libertad" fue de los más coreados y "Patria, Justicia, Revolución". La versión blaudivisionaria de "Katyuska" fue cantada a ritmo de marcha rápida por una juventud que se la sabe de memoria. El "Cara al sol", varias veces.

Hubo profusión de banderas nacionales, muchas con el águila, y algunas de los movimientos convocantes.

Tras la presidencia, una bandera de España de grandes dimensiones, portada horizontalmente, iniciaba la marcha, que tuvo varios cortes encabezados por las organizaciones convocantes.

Por ejemplo, la Asociación Cultural "In Memoriam Juan Ignacio", que recuerda la figura del joven líder asesinado durante la transición, sin que el crimen haya sido esclarecido.

También estaban los muchachos de "Resistencia Cristiana"

Por su parte, el Movimiento Católico Español y Acción Juvenil Española hicieron su propio despliegue, con pancartas, banderas y un coche con megafonía que cerraba la marcha. En la foto, antes de iniciarse la marcha, con su Jefe Nacional al frente, que enseguida pasó a la pancarta presidencial que abría la comitiva, junto al resto de líderes.

En la Plaza de Chamberí, la pancarta de Acción Juvenil Española cubrió el lateral aledaño a la presidencia.

Mientras que la del Movimiento Católico Español se situaba de frente.

Tras el manifiesto, la megafonía emitió el "Himno Nacional", cantado por muchos y con el brazo en alto por algunos. Al final, espontáneamente, volvió a surgir, vigoroso y sonoro, el "Cara al sol", para terminar una de las jornadas más espléndidas del patriotismo español, la más impresionante para muchos jóvenes y adolescentes que no habían vivido nada igual hasta el momento